El cantante dominicano Juan Luis Guerra fue profeta en su tierra y con un lleno absoluto en el anfiteatro de los Altos de Chavon, situado en la urbanización Casa de Campo (sureste del país), arrasó con un concierto a beneficio de su fundación, que lleva su nombre, y donde tuvo al público bailando de principio a fin.
La Fundación Juan Luis Guerra es una institución sin fines de lucro que anualmente lleva a cabo una serie de actividades benéficas a favor personas de escasos recursos y muy especialmente para ayudar a niños y ancianos.
A las 21:00 hora local (01:00 GMT), media hora después de la hora prevista para su inicio, el cantante salió al escenario acompañado de su orquesta 4:40 y una pantalla de LED en la que se combinaban extractos de algunos de sus vídeos, acordes con las canciones que interpretaban, e imágenes en vivo de lo que ocurría sobre el escenario.
Las más de 5.000 personas que abarrotaban el anfiteatro no dejaron de bailar ni un segundo sus bachatas y merengues y sólo algunas de las pocas baladas que interpretó el conocido cantante lograron hacer sentar a los asistentes.
Durante las casi dos horas que duró el concierto Guerra interpretó sus archiconocidas canciones entre las que no faltaron ‘Ojalá que llueva café’, ‘La llave de mi corazón’, ‘La Bilirrubina’, ‘Frío, Frío’, ‘Buscando visa para un sueño’, ‘Burbujas de amor’ o ‘Muchachita linda’ o ‘Tus besos’, primer single de su nuevo disco.
Al inicio de su actuación, Guerra dio gracias a los asistentes por acudir al concierto benéfico y prometió que el dinero abonado por las entradas iría «íntegramente» a los niños y ancianos necesitados a los que ayuda a través de su fundación.
Durante su intervención Juan Luis Guerra también dedicó la canción ‘Para que sepas’ a su mujer, Nora, con quien lleva 29 años casado, y a su hija Paula la canción ‘Muchachita linda’.
El conocido intérprete, que nació en Santo Domingo hace 58 años, llevaba más de 15 años sin presentarse en el exclusivo anfiteatro.